Enf psicosomáticas -Tengo fibromialgia

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Enfermedades psicosomáticas. Tengo fibromialgia

“Doctor, creo que tengo fibromialgia”. Entró en la consulta con una bolsa llena de radiografías e informes. Contó que tenía cuarenta años y que hacía tres había dado a luz a su tercer hijo. Desde entonces había comenzado un dolor sordo en brazos, piernas y cuello, acompañado de un cansancio permanente. Al principio lo atribuyó al trabajo doméstico y se automedicó con analgésicos, sin conseguir mejoría. Decidió acudir a un traumatólogo, que prescribió análisis y estudios radiológicos. Su diagnóstico fue que la paciente no tenía nada, sólo necesitaba vacaciones y vitaminas.

Al no mejorar, pidió consulta con otro traumatólogo. Este la confirmó que “no tenía nada de huesos ni articulaciones”, prescribió antiinflamatorios y aconsejó consultar con un reumatólogo. Tampoco experimentó mejoría y acudió, ya un tanto desesperada, a una tercera consulta. Al contarme esta última entrevista rompió a llorar. “El médico me tocó los brazos, las piernas, la espalda. Me dijo que tenía fibromialgia, que es una enfermedad crónica, que no tiene cura, que hay que aprender a vivir con ella, ¡y me tomó por loca! Me dio un antidepresivo y me mandó a pedir cita con un psiquiatra…”

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Este relato no es exagerado: he llegado a escuchar a un médico afirmar que “la fibromialgia no existe.” Lo sucedido a esta paciente era más común hace años, pero sigue pasando. El resumen es simple: Aquella mujer no fue escuchada, entendida ni atendida. Es muy probable que la atención que recibió fuera “técnicamente” correcta, pero no era, desde luego, la que necesitaba.

—Póngase en mi lugar, me dijo: Hace tres años que me duele el cuerpo y no tengo fuerzas para tirar de mí, pero tengo que aguantar porque llevo una casa, un marido y tres hijos. Los médicos me dicen que las pruebas “no dan nada”, y la familia y personas cercanas, hartas de verme con mala cara, sueltan un “¡hija, pues no será para tanto!” Termino por creer que no estoy en mis cabales, y encima el último médico me manda al psiquiatra…

La fibromialgia se asocia frecuentemente con el síndrome de fatiga crónica, donde la percepción del dolor es menos intensa pero existe una permanente sensación de cansancio, aunque no existan motivos aparentes para ello. En ambos casos, el diagnóstico es clínico, y tanto los análisis como los estudios radiológicos son normales. Es muy frecuente encontrar ansiedad y trastornos del estado de ánimo en estos pacientes, generados en parte por la misma enfermedad. Otros síntomas son alteraciones del sueño y disfunciones sexuales, trastornos digestivos y cardiológicos, todo lo cual configura un cuadro clínico difícil de evaluar y que requiere, como casi siempre, un tratamiento individualizado en función de cada paciente.

En muchos de los pacientes que he tratado ha sido eficaz el apoyo psicoterapéutico: combatir la ansiedad y la depresión es tan importante como disminuir el dolor. Las diferentes combinaciones de fármacos están destinadas a permitir que los pacientes puedan desarrollar una vida tan normal como sea posible, incluyendo ejercicio físico para evitar la rigidez y la atrofia muscular provocados por la inactividad. Aunque se trata de una enfermedad crónica caracterizada por una evolución lenta, es perfectamente posible tratarla para que las limitaciones que produce no resulten incapacitantes. Hago esta afirmación pensando en las personas que navegan desesperadas por internet sin encontrar consuelo para su dolor. Ojalá esto les sea de utilidad.

Dr. José María Esteve Barcelona